28 de febrero de 2010

Yo, con Augusto, no voy más a pasear

Augusto es un revolucionario convencido, mitin andante, despertador de conciencias, libertador de ilusos y sumisos. Ni grillos, ni moscas, ni perros se salvan de sus discursos libertarios. Con las ovejas es muy distinto. Con ellas se exalta, grita, se sale de sus casillas. Tengo que sujetar su rabia ante las incrédulas merinas que no aceptan el genocidio de su raza, que no ven la sangre negra de sus cinceles homicidas. Luego están las sirenas. Tarea difícil, porque sus dulces cantos le confunden. La invitación a abandonar su sumisión y sus serviles cantos, es entrecortada por la placentera somnolencia que le induce a seguirlas.

Y ahí estoy yo, salvándole de ser arrastrado a las profundidades por esas bellezas esclavas, incapacitadas para la vida terrenal. Un sopor dulce le mantiene aún en brazos de Morfeo. Cuando despierte, yo, su amigo, el dinosaurio más libre y paciente de la tierra... todavía estaré allí.

27 de febrero de 2010

Ceceándote. Aspirándote las eses de tus finales, las jotas de tu adiós incomprensible

/Achicharrá me tienen tus bezoh,
aucentes
Enritá me tienen tus palabrah,
aucentes.
Disgustá me tienen tus palabrah,
aucentes.
Encorahá me tiene tu compañía,
aucente.
¡Anda, que me tieneh contenta!/

25 de febrero de 2010

Demasiado tarde

Entonces es martes, seguro, por lógica. Los martes cierra. Perdí la noción del tiempo. La imagino, ayer, esperando, con lo que llovía. Recuerdo sus palabras, el lunes, a la salida del trabajo, si no estás... yo entenderé... y desapareceré de tu vida. No tardé en decidirme, no tenía elección, la idea de no tocarla nunca más me horrorizaba. El tiempo, esos días, había transcurrido extraño, embargado por la emoción de compartirme con ella y angustiado por la tormenta desatada de odios y lágrimas de mi mujer, mi propia pena..Me acerqué a su tienda. Las letras desteñidas por la lluvia, Cerrado por defunción,... mi maleta , ...mis lágrimas.



23 de febrero de 2010

Cuando los sueños se acaban




Cuando murió Gepetto, Pinocho anduvo varios días desorientado por la casa. No encontraba nada. No sabía hacer nada, ni comer, ni dormir, ni asearse... La soledad inesperada de su pérdida enmudeció la casa. Y no quería hablar con nadie, ni siquiera con sus amigos preocupados, llamando a su puerta todos los días y a todas horas. No entendía sus palabras, su tono de pésame. No. Eso sería admitir que estaba muerto. Al cabo de tres días, débil, les dejó entrar con actitud abatida, se dejó caer junto a las herramientas y volvió a ser un muñeco.

22 de febrero de 2010

¿Qué te pasa Pinocho?

Ilustración de Santi Jménez
- Nada. Que los nublos de este invierno se están alargando demasiado. Que gimotea la lluvia en el ambiente contenido y húmedo. Que me duele todo aquéllo que me falta:  mi honestidad, mi salud, mi paz, mis ilusiones, mi alegría, Gepetto...en ese orden. Que me duele todo lo que tengo, mi soledad, mi familia, mis amigos, mis palabras, mis huesos de pino, mi casa de cartón , mi trabajo inútil...en ese orden.
Y me duele que al final, no deje de llorar el cielo un rato cada día. Poco más puede hacer el cielo de este invierno con todo lo que no comprende. Que  me dejó Gepetto y ...llueve.
- ¿Nada?
- Bueno, ¿No es éso lo que le pasa a todos los mentirosos?

Al- Ándalus (Sevilla, 2005)























Identidad.
Antigua, andaluza, fémina, superviviente.
Siglos fluyendo en mis genes. Detengo un segundo el chorro con mi cámara. Bebo una vez más tus aguas claras. Hoy he vuelto a recorrer tus tierras, a compartir un fragmento de mi historia con mis gentes, a recordar de donde vengo, a decidir a dónde voy mañana. Te llevaré, compañera de camino, en forma de gen y de recuerdo despertado por mi cámara.

21 de febrero de 2010

Una vida en un vaivén






Cada ida, una venida.
Un beso a cinco mentiras.
A tres caricias la excusa.
Por cada excusa, dos pechos.
Un te quiero son tres miedos
y el miedo no tiene precio.

20 de febrero de 2010

¿¡HUEVO O GALLINA? ( Colaboración de Leia Alonso, 9 años)

















Hoy amanecí en casa de mi tía Isabel y tuvimos una pequeña charla sobre huevos y gallinas. Decíamos:
-¿Qué fue antes el huevo o la gallina? Y nos pusimos a dar vueltas, yo era el huevo y mi tía la gallina, mientras deciamos:

- ¡YO PRIMERO!
- ¡NO YO!
- ¡YO PRIMEROOOO!
- ¡NO YOOOOOOOOO!

Paréntesis rimado

Platja d´Ocata. 2009








Ando añorando mis versos en la tarde
en especial aquéllos que se sentían más libres.
Ando añorando tus besos esta tarde,
largas estrofas, romances infinitos.

Últimamente voy escribiendo en breve mi presente
intentando que no se caigan versos de la líneas
y que no  rimen, por hábito, contigo. 
Hoy narro lo justo para convencerme,
de que todo acabó, de que te has ido.

Ando contando historias en cortito,
donde pueda elegirme los finales.
Pienso que enajeno mejor con  unas cuantas prosas.
Ingenuamente siento que en lo escaso,
se abonan mejor las tierras del olvido.

Que es demasiado fértil el poema
en nostalgias y suspiros.
Que las estrofas se cierran casi siempre en falso.
Que las sílabas bailan siempre al son de tu cariño.
Que la letra de tu canción se me repite.
Que subjetivo tanto que te añoro.

Hoy te dedico este paréntesis rimado
porque anochece y el día anda nublado,
porque a punto está de llover triste y
probablemente,
por lo mucho que aún te amo.

19 de febrero de 2010

Tú, en vena (revisado)

El café, tus ojos. El cigarrillo, tus manos. Nuestro sofá, tu cuerpo cálido. Nuestra película, tus labios. Tus besos. Tú.


Valorado por Montalbà Bori, profesora de Escuela de Escritores)

Con respecto a Tú, en vena, reconozco que, de entrada, el título atrae. Se trata de un hiperbreve atrayente que, en principio, promete porque resulta sugestivo. Juegas con elementos como el café o el cigarrillo, que remiten al físico del personaje (ojos y manos), para ir ascendiendo en un crescendo de sensualidad hasta llegar a ese “Tú” final, que conforma, él solito, toda la oración. De todas formas, yo creo que puedes mejorarlo todavía, teniendo en cuenta que se trata de un relato y que lo importante, en tal caso, es que cuente una historia, una acción. Por tanto, creo que la mejor opción es guardarlo durante un tiempo para retomarlo más adelante, una vez terminado el curso, e intentar sacarle más partido, porque posibilidades sí tiene. Como muy bien indica Leonor en su comentario, las frases breves (y por tanto ajustadas a mínimos) confieren al relato un ritmo pautado que es una de sus mejores virtudes.




Pense, bête!!

(Sé que me dejo algo. pans bêt!. Azúcar y champú,... ya está. Cola, leche,... también. ¿Qué era?. Era importante.) Dio  tres o cuatro vueltas más entre las estanterías del súper confiando en que el proceso inverso funcionase,  encontrar sin saber lo que se busca. Nada.  La sensación de que algo imprescindible le faltaba la acompañó hasta llegar a su casa. Sin dejar la compra se dirigió a la cocina a mirar le "Pans Bêt"  de la nevera. Ya era una cuestión de amor propio. ¿Cómo podía tener tan mala memoria?.
Su ojos se apagaron, su cuerpo se distendió tanto que le cayeron las bolsas de las manos. Desolée. La maldita manía de escribir allí su nombre todas las mañanas.  

Agua que no has de beber...

¿Y por qué no? - se preguntaron los amantes  hablando por boca de sus cuerpos encendidos. Y el paso del tiempo, inexorablemente,  les fue argumentando  la respuesta. A modo de conclusión, la tragedia de su despedida.
Ilustración de Santi Jiménez

17 de febrero de 2010

Clasificados (¿ Se puede expresar con menos palabras?) UNA DE PATOS

Se busca pato tolerante dispuesto a convivir con los cíclicos y vitales cantos de cisne de pata con desdoblamiento de personalidad.
(Isabel González: 22 palabras )

Se busca pato que no meta la pata en los presuntos aspectos patológicos de su relación.
(Miguel Cobo : 16 palabras )

Pata con desdoblamiento de personalidad busca pato y cisne tolerantes y comprensivos  para relación estable.
(Isabel González: 15 palabras)

Pata busca patoso, preferiblemente pato, comprensivo, paciente y cariñoso.
(Txema Anguera : 9 palabras)

Y como dice Miguel, retorciendo el argumento de forma "patética" se siguen aceptando apuestas:

"Se busca al patito feo. Le espera el patíbulo".
(Miguel Cobo : 9 palabras)

Mamá pata tiene cinco hijas: Pata, Peta, Pita, Pota y Mari Carmen.
(Manuespada: 12 palabras)

La patología de Maricarmen  resultó muy rentable para la familia.
(Isabel González: : 10 palabras)

Pato desaparecido. Se le vio ayer jugando con el Milán.
(Johan Bush Walls : 10 palabras.)

Pata con aires de cisne busca pato rico y generoso.
(Isabel González : 10 palabras)

Busco quinta PATA, o sea, PATOlogía.
R.M : 6 palabras

15 de febrero de 2010

MIcrorrelato de una sola noche.

Ilustración de Santi Jiménez
Eres breve, conciso. Las palabras justas, ni una más ni una menos. Casi sin adjetivos, como tiene que ser. Los elementos narrativos adecuados.  Intenso desde el minuto uno. Final sorprendente y explosivo. El título, ya de por sí sugerente y atractivo, adquiere en el final todo su sentido. Sin riesgos, sin compromisos, sin trascendencia. A pasarlo bien y adiós muy buenas. Perfecto. Que más puedo decir...¡ah, sí!...que no me gustas.

El corazón a cien

Lucía llegó a la estación de Puicerdà con el corazón a cien pero sin miedo. Cuando el tren paró, buscó su rostro en todas las puertas que se iban abriendo, se subiría con él y bajarían en la siguiente estación, La Tour de Querol, el lugar que ella había elegido para encontrarse a solas. Allí estaba, con su parca gris y la mano tendida. Subió y le besó en los labios, su gesto de sorpresa, su corazón a cien, muy asustado.  La Tour acogíó el descubrimiento mutuo de sus cuerpos, que se encendieron entre las nieves y el frío de aquel soleado y mágico  dia de invierno. Ese día, que cambió sus vidas para siempre,  fue el principio de una pasión inagotable, casi adictiva. Encajaron sus besos desde el primer momento, se reconocieron sus pieles como si ya hubieran estado juntas, quizás en otra vida. Nada les era ajeno, nada nuevo. Al atardecer, él  se marchó feliz y enamorado, el corazón a cien , sin miedo. Ella le dijo adiós desde el andén, el corazón a cien, muy asustada. ¿Y si no debía volver a verle? ¿ Y por qué no?

13 de febrero de 2010

Total, de algo hay que morir.

El alcalde elaboró el proyecto a toda prisa siguiéndo los esquemas de los que había leído y sin importarle la opinión de los pocos habitantes que quedaban en el pueblo.
Los jóvenes hace ya tiempo que les abandonaron, que dejaron morir sus tierras, sus sueños, sus cultivos. No iba a permitirles ahora que alzaran falsamente sus pancartas ecologistas. Que se hubieran quedado a dar a la tierra lo que a la tierra debían.
La vida volvería al pueblo aunque fuese una vida algo radioactiva. Un cementerio para vivir que el de morir ya lo tenían lleno.

Baila conmigo

La invitó a bailar. 
Aquel vestido negro y ajustado a sus formas femeninas resultó altamente conductor de la suavidad y el calor de aquellas manos. Un escalofrío recorrió su espalda y, desconcertada, apretó su pecho contra el suyo desmayando su cabeza en aquel hombro predispuesto y ancho, ofreciéndole, sin pretenderlo, su cuello apetecible. 
Ël sintió correspondida entonces su caricia y le retiró ese mechón de pelo que caía sobre sus labios  rozándolos suavemente con sus dedos.  Su cuerpo se encendió cuando la vio cerrar los ojos estremecida y entregada.
Su amor nació aquel día, inesperadamente,.. sin querer. Y de alguna forma supieron sentirse así el resto de sus vidas, en el final de su microrrelato.

(Ilustración de Santi Jiménez)

Textualmente ( co- ganador, junto a Claudia Sánchez del Torneo de comentarios inventados de Miificiones

Siempre me tienta empezar por tus finales. Ya sabes que soy bastante urgente. Avanza tu relato perfecto y coherente, pausado pero intenso, conquistándome. ¡Como me gustan tus previas! Cómo me enciendes. No entiendo cómo, conociéndote, pulsas siempre el detonador cuando menos me lo espero, y medio muero combustiéndome entre el placer de las deflagraciones y la frustración de que se acaben ...tus minificciones.

11 de febrero de 2010

Hasta que la vida nos separe

Aquel día amaneció sin vida. Ya en el tanatorio velaba angustiada su propia muerte y no  la consolaba el hecho de seguir respirando, como todos los que la querían se empeñaban en hacerle creer. Te acompaño en el sentimiento, ahora hay que ser fuerte, la vida sigue, piensa que al menos ya no sufres, por fin descansarás en paz, es mejor así, los últmos meses han sido muy duros, ánimo Lucía, hija, ahora a mirar "pa lante";  mami, pasa página que aquí estamos todos contigo, dame un abrazo hermanuchi, tita no llores... y así una tras otra resonaban  aquellas frases de ánimo que  se perdían en el ambiente lacrimógeno de la sala  sin que ella recibiese ninguna. Permanecia de pie apoyada en el féretro sin poder quitar la vista de aquella mujer hermosa que aún conservaba el gesto de enamorada en sus labios, como si hubiese muerto besándole.
En la sala contigua, Arturo, de pie junto a su féretro  lloraba también desconsoladamente.  Tampoco a él  le compensaban las palabras de ánimo de los demás. A las 11 en punto dos misas daban el último adiós a los finados. Ambos séquitos se cruzaron cuando se dirigían  hacia el lugar que ocuparían para siempre en aquel particular cementerio de amores imposibles. Lucía y Arturo cruzaron un momento sus miradas húmedas y tristes en un último gesto secreto de complicidad. Ni siquiera al final pudieron estar juntos.

10 de febrero de 2010

¡Maldita depresión!

Umberto Boccioni (1882-1916)
LLegó a casa  arrastrando su lumbalgia y el carro de la compra. Después de despojarse de la ropa, puso la tele como siempre, por eso de la compañía, sin prestarle demasiada atención. Conocía su casa al dedillo, la falta de visión no le había impedido llevar una vida normal. Sólo fue duro al principio, por la depresión. 
El caso de la cabeza ha despertado una gran expectación entre los vecinos..."
Atónito, se acercó a tientas al televisor llamado por el titular con que abría el informativo. Había perdido toda esperanza desde el día en que la policía cerró el caso y dejó de rastrear todas las zonas  que, en un principio, se creyó que podría encontrarse. La noticia concluía dando  morbosos detalles del alto estado de descomposición del miembro vital a la espera de poder ser identificada en breve. Tres meses perdida, una lástima, maldita depresión, ya no podrían reimplantársela, pero mañana mismo iría a reclamarla. Se merecía un entierro como es debido.

9 de febrero de 2010

¡Por fin!






















Por fin sola, ya no podía más. Mis suegros, los niños, las comidas, las lavadoras, los horarios, el trabajo, los médicos, las extarescolares,...mi marido, suspiró Cecilia. Al despertar tenía la sensación de seguir allí, en aquel remanso de paz, aquella brisa acariciando su piel desnuda. El  sonido del despertador acabó de sacarla de ese sueño utópico y  la  llevó corriendo a la cocina a preparar los bocadillos de los niños, al armario a buscar las cosas de piscina de Arturito, a la ducha 5 m antes de que la ocupase su marido, a la ardua tarea de despertarlos, al inacabable desayuno, a los lloros, las riñas, los confilctos, a firmar la nota de María, a las prisas. Entonces sintió un cosquilleo en uno de sus pechos, abrió los ojos lentamente y espantó a aquel pajarraco inoportuno que había roto en pedazos aquel sueño hermoso en el que  no estaba sola como ahora.

8 de febrero de 2010

A la intemperie.

Desconsolada.
Llueven chuzos de punta
dentro del  alma.
Camino a la intemperie.
A cielo descubierto.

Tanka triste.

Cómo me dueles...
siento tanto dolor...
tanto desgarro...
que no acabo de parir
este cruel adiós nuestro.

6 de febrero de 2010

A Alex, 21 años...y 9 meses

Te protegí, bichito, hasta que saliste del cascarón ilusionado y sorprendido, la vida ante tus ojos. Ya no puedo, mi niño, darte el calor de mis entrañas, guardarte dentro de mi caparazón caliente y tierno. Corre hacia el mar, cariño, allí estarás por el momento, a salvo. Sortea los peligros, hay animales feroces acechando tu camino que adoran tu caparazón aún tierno. Sálvate, mi chico, esquívalos, velocidad y astucia. Sé, hijo mío, que no existo para tí mientras dure tu lucha por la supervivencia, mientras marcas tu territorio y tu camino, pero yo sigo aquí Alex, ...cerca, muy cerca.


Mamá

5 de febrero de 2010

Desolée










Désolée, mon cheri,je ne viendrai pas te voir aujourd´hui, parce tu
m´as trop manqué...ces jours-ci.

Desig

(La fotografía «Olas de Niebla» pertenece a Alejandro Medina)









Vent del nord xiula a la mar,
amb rabia, impotència i plors...
i les cames encongides
pel desig i per l´ amor.

We can do it

Fotografía de Azul Anzau
La fuerza moral de sus convicciones agigantaba la autoestima de David. Le plantó cara, mirándole desde lo más alto. Le acompañó también la suerte del novato y los vientos soplaron a su favor para vencerle. La mole se derrumbó con gran estruendo. Salían de su herida mortal, a borbotones, su prepotencia vana, su fuerza por la boca, por donde murió Goliath, como los peces.


3 de febrero de 2010

Michelito

Sus escasos doce años no pudieron con la embestida de aquel toro. El grana de su sangre empapaba el oro de su pequeño traje.  Michelito salió llorando de la plaza, ¿Cómo iba a explicárselo a mamá?

"Guardar como"

"REDACTAR"...le quería tanto que deseó despedirse de él sin que sus palabras le hiciesen ni un ápice de daño. Se entregó en cuerpo y alma a la redacción del mensaje y de su forma.
"ENVIAR"...Indecisa mantuvo el cursor largo tiempo en esa opción sin atreverse a pulsarla, tenía la sensación de que le enviaba su vida entera.
"ASUNTO: yo"... Matías abrió el correo, y horrorizado se encontró a Teresa como archivo adjunto.  

2 de febrero de 2010



Anteayer, tacones altos y ganas de vivir urgentes, tropecé: caí de bruces. Mis rodillas y mis manos impactaron aparatosamente en el asfalto. Ayer, las heridas curando todavía, tropecé de nuevo y en el aire, escarmentada, pude corregir la trayectoria y tan sólo me torcí un tobillo. Hoy,  enormes orejas de asno a la vuelta de la esquina, os puedo asegurar que no pienso volver a tropezar con esa hermosa piedra que el amor pone siempre en mi camino.
Ilustración de Abraham Alcázar